En el primer mes coincidiendo más o menos con la fecha de tu anterior regla puede aparecer una pequeña pérdida de sangre que puede deberse a la implantación del óvulo en el endometrio. De hecho, también es normal que esto pase en los dos meses siguientes y no hay que alarmarse.
Estas manchas suelen ser en muy pequeña cantidad, de color oscuro o marrón y sin molestias o pinchazos en el bajo vientre.
Hay que alarmarse si aparece sangre roja con o sin coágulos o, si estas leves pérdidas van acompañadas de dolores intensos en la zona pélvica. En tu próxima visita al tocólogo coméntaselo por si considera oportuno hacerte una ecografía y valorar la situación.
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